sábado, marzo 15, 2008

La alegria de la Desgracia


Cosechando en los parrones

Entre tu blanco y lo sombreado,

Recorro tu sonrisa

Al mirar tus suaves labios,

y con la felicidad de mi desdicha

A veces un poco tímida,

Acaudalada por el néctar

de mi uva exquisita

Como el color de tus mejillas

Y esa mente que me incita

Por eso, eres violeta y manzanilla

Por esa riza de tu alma, me ilumina

Con el ritmo blando

Del seudo agro gótico de tu vida

Como la fruta de mi lira

que te embriaga a medio día

eres eso y toda, compañera Mía…